El pedero, la podredumbre de pezuña o también conocida como pododermatitis es una afección en las pezuñas de los rumiantes. Se trata de una infección bacteriana que en estadios avanzados puede comprometer la vida del animal que la padece. A continuación, analizaremos sus causas, síntomas, y estrategias de prevención y tratamiento.
¿Qué es el pedero?
Es una enfermedad común que afecta a las pezuñas de los animales. Se caracteriza por la inflamación y la degeneración del tejido del casco, lo que puede resultar en cojeras, dificultades para caminar y, en casos severos, la pérdida de apetito y peso. También se relaciona con una bajada en la producción de leche. Uno de los principales agentes causantes de la infección es la bacteria Fusobacterium necrophorum que suele encontrarse en la materia fecal del propio ganado.
Causas y Factores de Riesgo del pedero
Esta afección a menudo se desarrolla en ambientes húmedos y sucios, donde las bacterias pueden proliferar. Las áreas de establos fangosos, la acumulación de estiércol y la falta de higiene aumentan el riesgo de infección. Además, lesiones ya existentes en el casco, como cortes o abrasiones son puntos de entrada para las bacterias causantes de la enfermedad.
La falta de mantenimiento regular de las pezuñas y la ausencia de superficies adecuadas para caminar pueden contribuir al desarrollo del pedero. Además, condiciones climáticas extremas, como el calor excesivo o el frío intenso, pueden aumentar la susceptibilidad de los animales a esta afección.
Síntomas y diagnóstico del pedero
Los síntomas de la podredumbre de pezuña pueden variar, pero comúnmente incluyen cojeras, dificultad para caminar y evidencia de dolor al examinar las pezuñas. Además, también se puede apreciar lesiones necróticas con mal olor. Es esencial que los profesionales de la ganadería estén atentos a estos signos y realicen inspecciones regulares de las pezuñas para detectar posibles problemas.
El diagnóstico temprano de esta infección es crucial para iniciar un tratamiento efectivo. Si las medidas de curación se producen en los tres o cuatro días siguientes a la aparición de la enfermedad, la tasa de éxito es muy alta. Los veterinarios suelen realizar inspecciones visuales y, en algunos casos, toman muestras de tejido para confirmar la presencia de bacterias patógenas. La identificación rápida y precisa permite implementar medidas de control y tratamiento oportunas.
Pododermatitis: tratamiento y manejo
El tratamiento de la podredumbre de pezuña implica una combinación de medidas veterinarias y prácticas de manejo en la explotación ganadera.
En casos leves, la limpieza y desinfección de las pezuñas con un producto como nuestro Previo PDR, junto con la administración de antibióticos, pueden ser suficientes para controlar la infección. Sin embargo, en casos más graves, puede ser necesario el recorte quirúrgico del tejido afectado.
El manejo ambiental también desempeña un papel crucial en el control del pedero. En el siguiente punto veremos en detalle qué medidas se pueden tomar para prevenir la propagación de esta infección.
Prevención de la Podredumbre de pezuña
La prevención es clave en la gestión del pedero. Los ganaderos pueden implementar varias estrategias para reducir el riesgo de infección. Estas incluyen:
- Higiene rigurosa: mantener limpios los establos y proporcionar áreas secas para el ganado.
- Recortes regulares de paredes y suelas: mantener las pezuñas bien recortadas para prevenir la acumulación de suciedad y bacterias.
- Monitoreo continuo: realizar inspecciones regulares de las pezuñas para detectar lesiones y signos tempranos de la enfermedad.
- Manejo de heridas: tratar inmediatamente las lesiones en el casco para prevenir la entrada de bacterias.
- Programas de vacunación: consultar con el veterinario sobre la implementación de programas de vacunación adecuados.
