Los parásitos son uno de los males que puedes encontrar en tu instalación ganadera, pueden ser muy peligrosos ya que en función del tipo, pueden provocar diferentes enfermedades en los animales de tu granja. En este sentido, es importante conocer cómo afectan a los animales, cómo realizar un adecuado tratamiento ante una plaga y cómo limpiar y desinfectar el espacio para prevenir nuevos contagios.
Hoy te contamos algunos detalles sobre los parásitos que provocan la sarna porcina, te facilitamos algunas indicaciones para reconocer sus síntomas y algunos consejos para prevenir y tratar este tipo problema en tu granja.
La sarna sarcóptica o sarna del cerdo es una de las enfermedades más comunes que puedes encontrar si tienes ganado porcino. Se trata de una enfermedad en la piel de los cerdos que se produce por la acción del ácaro Sarcoptes scabiei var. suis. Este ácaro puede afectar a todo tipo de etapa productiva: lechones, transición, cerdos de engorde… por lo que es importante estar pendiente para actuar en caso de que fuera necesario.
Síntomas y tratamiento de la sarna porcina
Para detectar la presencia del Sarcoptes deberás fijarte, principalmente, en el comportamiento de los animales y en el aspecto de su piel. Los cerdos experimentan picazón y cambios en la piel, por lo que si ves que se rascan constantemente debes examinarlos y ver si tiene parásitos.
En relación a la piel de los cerdos, podrás apreciar irritación y costras, principalmente en la cabeza, las orejas, el cuello y el dorso, aunque en casos severos las lesiones pueden verse por todo el cuerpo del animal.
Además, el tejido se inflama y puede agrietarse generando heridas que pueden contaminarse con bacterias del ambiente. Los animales afectados se rascan y también pueden hacerse heridas con probabilidad de infectarse.
Si detectas síntomas de sarna porcina en tu ganado existen varias formas de tratar al animal. Una de las opciones es pulverizar productos de uso tópico como la foxima sobre el cuerpo de los cerdos con sarna. También puede aplicarse ivermectina por vía subcutánea, siempre siguiendo las indicaciones del veterinario.
Tratamiento de sarna en tu granja
Este parásito se transmite por contacto, por lo que si detectas que alguno de tus animales tiene sarna porcina deberás aislarlo y tratarlo alejado del resto del ganado. Otras vías de contagio pueden ser el contacto con las paredes o comedores contaminados, por ello es importante desinfectar y limpiar bien las instalaciones cuando se detecta el problema. Por último, la sarna puede ser transmitida por los utensilios de manejo de los animales, por lo que se recomienda su limpieza y desinfección de manera adecuada.
En estos casos es importante seguir tres pasos para mantener tus instalaciones ganaderas en perfectas condiciones.
Limpiar tu granja
La limpieza de las instalaciones es un factor fundamental para la prevención de cualquier tipo de contaminante. En el caso de que alguno de tus animales padezca sarna, puedes utilizar detergentes Previo Quat para limpiar completamente el espacio.
Desinfectar las instalaciones ganaderas
Una vez tengas limpios los distintos espacios en los que habita tu ganado, debes proceder a la desinfección. Para ello, puedes usar Sanitas Forte Vet, un desinfectante de amplio espectro indicado para distintos tipos de instalaciones que además elimina los malos olores.
Descubre los pasos que tienes que seguir para realizar una correcta desinfección de tu granja en el siguiente vídeo:
Aplicar insecticidas en tu granja:
Para prevenir la aparición de ácaros e insectos entre tu ganado, se recomienda aplicar periódicamente insecticidas. Si quieres un producto que te ayude a evitar distintos tipos de plagas, puedes utilizar los de amplio espectro como Arpon G, adecuado para combatir insectos voladores y ácaros o Arpon Diazipol, un insecticida emulsionante que combate tanto los insectos voladores como los rastreros.
Otra forma de prevenir la aparición de esta enfermedad es efectuar baños o pulverizaciones periódicas cada 2 ó 3 meses de todo el ganado. Puedes utilizar Previo LC5 para limpiar la piel de los animales y prevenir la aparición de ácaros y gérmenes en la piel.
